Ayer por este medio hable de Internet; de que manera esta herramienta electrónica afectaba a la educación y, por ende a toda la sociedad.
Alertaba sobre la necesidad de darle un buen uso, y de esta manera crear una poderosa vía de comunicación social armoniosa y positiva.
La dirigencia política con su capacidad intuitiva intacta han observado este fenómeno comunicacional y el uso que se le podrá dar para captar voluntades y lograr de esta manera objetivos electorales, la cual no está mal si lo que se pretende es lograr la felicidad del pueblo.
Dotados de fuerte personalidad ejercen – de esta manera – sobre la comunidad acciones psicológicas y persuasivas que generan marcos referenciales formadores de conductas que los llevan a razonar y actuar conforme al patrón propuesto que los define como modelo a imitar.
La utilización “inteligente” de los medios de comunicación por medios de los dirigentes orientan a las comunidades en la dirección deseada por ellos; generando fuerzas atractivas en las que basan sus campañas electorales.
De esta manera atraen a las comunidades influyendo sobre sus costumbres hasta que las mismas les presten atención razonando a partir de allí conforme al patrón virtual diseñado y definiendo ( a veces de manera inconciente) ,paradigmas morales conforme a la matriz “diseñada” por los formadores de imagen de los líderes políticos que muchas veces manipulan en provecho propio sin importarles mucho el bien supremo buscado que es la felicidad del pueblo y la grandeza de la Patria
En este punto es donde está el riesgo de las comunicaciones y la información. Cuando una sociedad está en estado de confusión como está ocurriendo con la nuestra la misma puede ser presa fácil de engaño; y en estas condiciones la decepción esta a la “vuelta de la esquina” y la decadencia moral muy próxima.
Este estado de confusión, se profundiza cuando los patrones morales mas claramente los modelos de referencia vulneran permanentemente el marco moral y ético en el que afirmamos nuestros paradigmas de conducta ciudadana.
Quebrando y trastocando valores básicos de conducta y convivencia.
Por ello es importante los ejemplos que debemos dar asumiendo actitudes y comportamientos éticos como norma de vida que nos haga recuperar frente a la sociedad la credibilidad perdida.
Por todo ello digo y reclamo que utilicemos los medios de comunicación de manera responsable y transparente.
Por suerte ya no se necesita ser un potentado para llegar a la gente; INTERNET – en este noble caso – está al alcance de todos para conectarnos y corregir los defectos que están empañando normas de comportamiento.
No debemos olvidar que solo la verdad y la educación nos harán libres.
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